Como llegó el cine a Águilas y Cines de nuestra ciudad.
Es un dato curioso, para la afición desmedida de hoy y digna de figurar en esta pequeña historia, la forma rudimentaria, infantil y regocijante como tuvieron conocimiento del cine los aguileños. Corría el año 1904, más o menos, cuando Don José María Marín, que construyó y explotaba el primer balneario, conmovió al pueblo de Águilas con el anuncio de revelar este gran descubrimiento, organizando para ello unas sesiones de música con “gotas de cine”, pues sólo así se podía llamar. En efecto, en un almacén habilitado en el patio del “Curro” se vieron las primeras fotografías animadas. Una de ellas representaba la entrada y salida de operarios en la Casa Gaumont, otra la llegada y partida de viajeros en la estación de París, y la tercera mostraba los baños de Diana en Alicante, viéndose cómo los bañistas entraban, salían, nadaban o daban saltos mortales desde un trampolín. Aquello era maravilloso, la fotografía había tomado vida, acción, movimiento. ¡Cómo les maravilló entonces a los aguileños! Dos años después, las cosas cambiaron. En el lapso de unas pocas horas vimos alzarse en la Glorieta de la Playa donde hoy está la Plaza del Rocío un soberbio barracón con su gran lienzo de plata, más de 500 butacas y un grandioso órgano que ocupaba toda la fachada y vestíbulo, dotado de luces y figuras de bulto que accionaban y giraban al ritmo de la música. Era uno de los cines ambulantes que con gran éxito explotaban, por las capitales españolas, los Hermanos Pradera de Valladolid. Con ello empezó la iniciación de los aguileños al cine y presenciaron o fueron testigos de los primeros pases que se habían dado para la película de asunto, aunque en sus más infantiles balbuceos. Para hacer una apreciación, ahí tenemos el título de una de las películas de la época : “Joven distinguido y rico desea casarse”. Para ello el joven en cuestión ponía un anuncio a sus desconocidas pretendientes en un parque , donde el se presentaría de chaqué gris con una camelia en el ojal. La afluencia de señoritas concursantes a este matrimonio espectacular daba lugar a carreras, confusiones, persecuciones y varias bufonadas , hasta que el héroe, abrumado y confuso, optaba por huir, dejándolas a todas con sus ganas de boda. A esto se reducía una película, casi siempre interpretada por el popular Max Linder, que fue astro de aquellos tiempos. El pueblo de Águilas acudió en masa ante la novedad, vaciándose los bolsillos ante la taquilla con igual entusiasmo que lo hace ahora, y hay que confesar que lo que ofrecían era pintoresco. Mientras el gran órgano iba interpretando un repertorio de música selecta o de operetas, se proyectaba en la pantalla medio centenar de vistas fijas de monumentos y panoramas españoles y otras tantas, luego, del extranjero. Seguía a esto la proyección de cintas, que eran mudas, sin ningún letrero, pero las citadas cintas, hábilmente y con mucha gracia, se encargaba de explicarles a las gentes, Valentín, un cicerone especialista, que puesto de pie en el pasillo central, y con un largo puntero en la mano, atendía a la pantalla y contestaba con donaire los comentarios y preguntas del público presente. Así conoció el público de Águilas el cine. Después se instalaron varios, el primero en el Placetón de la esquina, y a cuya primera tentativa, sucedieron otras varias, hasta venir a parar al cine que tenemos hoy. Nuestro pueblo siempre ha tenido un elevado nivel artístico y en el pasado gozó de cierto prestigio tanto por los teatros como por los cines que había en Águilas. A principios del siglo pasado y hasta los años treinta, los espectáculos en Águilas tuvieron una época de mayor esplendor, ya que numerosas compañías y profesionales pasaban largas temporadas en nuestra ciudad preparando sus obras que después representaban en otras ciudades de España. El mundo del Teatro va ligado también al del cine, ya que algunos teatros se transformaron, posteriormente, en cines. El teatro más antiguo de Águilas fue el denominado de la Caridad y después corriendo el año 1830, se construyó en la huerta el recordado Teatro Circo. Este funcionó hasta el año 1904. Después vinieron varios más: El Teatro Romera y el Teatro Salón Ideal, entre otros. Este último fue inaugurado en el año 1912, pasando después a ser cine con el nombre de Salón Ideal y estaba en la calle Cassola cerca de la playa de Poniente. Fue una pena la desaparición ya que era una verdadera joya para Águilas en su aspecto arquitectónico y debía haberse conservado para la posteridad. Del resto de cines, hoy todos desaparecidos, daremos una breve descripción. El último fue el recordado Cine Capri que nos acompañó hasta el año dos mil y que tenía las salas de verano e invierno con el clásico cine de siempre. Hasta hace poco quedaba el edificio del cine Calablanca como recuerdo de un pasado que se nos fue y que marcó toda una época de entretenimiento y de ilusiones. Los cines que tuvimos y desaparecieron eran, aparte de los ya mencionados al principio de este trabajo, los que detallamos a continuación: Cine en barracón, estaba en el Placetón. Se hacía cine mudo a principios del Siglo pasado. Teatro Cine Circo de la Huerta: Estaba radicado en la Huerta del Consejero. Hacían cine mudo y teatro, así como las zarzuelas y circo, peleas de gallos y lucha de perros de presa. Estaba construido en forma de U y funcionó hasta el año 1904. Cine Teatro Romera: Estaba al final de la calle Cassola, fue fundado por Don Ginés Antonio Romero, aunque básicamente se representaba Teatro, fue inaugurado en 1883. Cine Teatro España, formaba parte del complejo del balneario del mismo nombre inaugurado en 1905. Proyectó películas mudas y desapareció en el año 1913 a consecuencia de un voraz incendio que acabó con todo el balneario. En este cine se empezaron a proyectar las películas de moda de aquel momento y eran series que ponían toda la semana. Salón Reina Victoria. Edificado sobre las ruinas del anterior balneario España y en él se proyectaban todo tipo de películas, particularmente de jornadas. Y aquí, tenemos un programa de aquel tiempo en el que se anunciaban las películas de serie de esta manera: “Salón Reina Victoria, mañana domingo se proyectará en este salón la grandiosa y maravillosa serie altamente sensacional y sugestiva titulada “los vampiros”. Todo cuanto pudiéramos decir de esta hermosa serie es nulo, comparando con el éxito tan enorme que ha alcanzado en todas cuantas partes se ha proyectado. Los primeros artistas de este film misteriosos son Don Casto y vuestro amigo el simpático Sardinilla. Verdadera y hermosa narración viviente de suprema y extensa emoción, los vampiros. Esta monumental serie se compone de nueve sugestivas jornadas de gran interés dramático tituladas: • “La Cabeza cortada” • “ El eriptocramo” • “El Espectro” • “la evasión del muerto” • “Los ojos que fascinan” • “Satanás” • “El amo del rayo” • “El hombre de los venenos” • “Las bodas sangrientas”. Nota importante: A todas las personas nerviosas les está vetado ver esta asombrosa serie. La serie que más emoción causará en Águilas será “Los Vampiros”. No deje de ver mañana que se proyectará en el Salón Victoria.” Teatro Salón Ideal: Inaugurado en 1912 como teatro, pasando posteriormente a ser cine con el nombre de Cinema Ideal. Estaba erradicado en la calle Cassola, actualmente un edificio de pisos. Tenía platea, piso superior (gallinero) y palcos, siendo una joya arquitectónica para la época. En este cine se proyectaron desde películas mudas, hasta películas de serie como las famosas “Moneda Roja”, “los tambores de Fumanchu” y una gran colección de películas del oeste americano como “el Valiente y la muchacha”. Los artistas, cuyos nombres escribimos como pronunciamos los chicos del pueblo entonces, eran Bud Jones, Tony Ler, Ken Mayner, Tom Mye con su caballo Tarzán y cuando el protagonista salvaba a la muchacha había un pataleo en el cine. También en los años veinte después de la función y a altas horas de la madrugada se ponían las famosas películas porno que llamaban “las Cuartas”. Posterior a la guerra y por los años cuarenta y cincuenta, después de las películas actuaban vocalistas con canciones de moda, las cuales eran coronadas por el público asistente. En la grada de general y después de la guerra, más de uno ha pillado piojos. En este cine vimos los famosos documentales de la casa UFA alemana, algunos ingleses y el famoso NODO español. Gran Cine España. Estaba en el lugar que actualmente ocupa el edificio Madrid. En origen fue un almacén de carbones y que posteriormente se transformó en Cine. Tenía General y butacas. Fue el primer cine de Águilas en el que se proyectó una película de color de la firma alemana UFA titulada “Las aventuras del barón de Mouchasen”. En este cine trabajé de aprendiz en la cabina del mismo con Pepe Espinosa y Antonio “El Perula”. Yo liaba las películas en las bobinas. Este cine funcionó hasta finales de los años cincuenta. Cine de Piñuela. Estaba frente al edificio Madrid, subiendo la Cuesta del Castillo. Era un cine de verano y su vida fue efímera. Tenía general y butacas y se podía entrar al mismo pagando con sellos de correos y a veces y debido a la competencia te regalaban un lápiz para la escuela. Cine Plaza de Toros. Ubicado en lo que hoy es la Plaza de Alfonso Escámez. Funcionó durante los años de la guerra española, 1936 y 1937. Se exhibieron algunas películas rusas. Entre ellas “Los Marinos de Rostán” y el “Acorazado Potemkin”. En este cine se celebraron, durante el tiempo que duro, varios tipos de actos políticos. Cinema Popular. Radicaba en la Glorieta del Casino. Como su nombre indica era al aire libre y opero durante la guerra, desapareciendo al final de la misma. Gran Cinema o Cine Plaza de Toros. Estaba en los que hoy es la Glorieta de Antonio Cortijos. Era una Plaza de Toros que durante varios años se adoptó como cine, construida en madera y obra, desaparece en los años sesenta. Su nombre completo era Gran Cinema Plaza de Toros, aparte de celebrarse varias novilladas, la mayoría a beneficio de alguna entidad caritativa, se dieron varias funciones de aficionados a beneficio del Hospital, homenajes a Francisco Rabal, funciones de teatro dirigido por Tamayo, gran director de su tiempo. Combates de boxeo donde intervino un púgil aguileño, Puche. También tuvo lugar la elección de alguna Reina de las Fiestas de Águilas y se estrenó la película “La Reina Santa” de fama en aquel entonces. Cine Cope. Estaba en la Marina de Cope, actualmente en su lugar hay un restaurante. Era un cine de pedanía para la gente de los alrededores de la zona. Cerró sus puertas a finales de los sesenta. Gran Cinema. Llamado popularmente “Cine Pijama” y denominado así por la pintura que cubría a rayas su fachada. Estaba en la Glorieta de Alfonso Escámez, actualmente está en su lugar el Hogar del Pensionista o Tercera Edad. Era un cine de clase que tenía, además, un restaurante y un hotel. La sala era de general y butacas. En este lugar vimos muchas películas de Cantinflas, actor mexicano de moda en aquellos momentos. Cine Cames. En la casa de Acción Católica. Empezó a funcionar en los años sesenta y, en principio, era para socios si bien después se amplio al público en general. Emitían películas en régimen de Cine Club hasta bien entrados los años setenta. En este cine se hicieron los primeros Cine Forum de Águilas. Cine Capri. En calle del Aire nº 69. Funcionó hasta el año 2000 como cine si bien tuvo épocas que se daban representaciones de Teatro y Revistas. Actuaron cantantes famosos del momento tales como Rafael y varios de flamenco. Tenía dos salas bien diferenciadas: una de invierno y otra de verano, ambas con general y butacas. En este cine se estrenó con gran éxito la famosa película “Psicosis”. Cine Calablanca. Sito en el Placetón. Este edificio existió hasta hace muy poco tiempo y se ha convertido en edificio de pisos y apartamentos. Proyectó todo tipo de películas pero como anécdota cabe señalar que, a principios de la democracia, fue pionero en la emisión de películas eróticas. Sólo tenía patio de butacas. Cine Club de la Casa de la Cultura. Ha funcionado hasta fecha reciente. Casino de Águilas. En este lugar se han proyectado últimamente películas, destinadas a los socios, y sin cobrar entrada. Y por último tenemos los Cines del Hornillo ubicados, como su nombre indica, en la Urbanización “El Hornillo”. Cines con los últimos adelantos en cuanto a maquinaria y sistemas de proyección, con los últimos estrenos de cine en España. Águilas siempre ha sido una ciudad adelantada a las demás, habiéndose estrenado películas antes que en la Capital de España y otras capitales de provincia de relevancia. Siempre hemos sido unos adelantados en este bello arte del cinematógrafo que se llamó en sus principios. Biblioteca consultada: - Notas de Don Francisco Martí Lloret - Fichas Cacitel - Semanario Vida Aguileña - Archivo personal de Emiliano Navarro.
AUTOR: Emiliano